China es el mercado automotor más grande del mundo y a finales del año pasado, BYD superó a Tesla como el mayor vendedor de autos del planeta.
El fabricante de automóviles chinos, del que alguna vez se burló Elon Musk, presentó un nuevo sistema de propulsión híbrido que según ellos puede viajar de Nueva York hasta Miami sin recargar combustible y sus acciones en la bolsa de valores Hong Kong se dispararon un 5%.
Tesla es el vehículo eléctrico más vendido en Estados Unidos, pero su participación en el mercado extranjero se ha visto mermada porque la competencia consiguió abaratar el costo de sus automóviles. Los sedanes de BYD son más baratos y su precio ronda cerca de los $14 000.
Otra ventaja que posiciona al fabricante chino por sobre Tesla es la fabricación de autos híbridos. De acuerdo con una encuesta de la empresa JD Power, el 52% de los consumidores estadounidenses prefiere contar con un auto híbrido debido a que los eléctricos no poseen suficientes estaciones de carga.
Los automóviles estadounidenses todavía se encuentran protegidos de la competencia mediante aranceles estrictos e importantes obstáculos regulatorios. Pero nadie está seguro de cuanto tiempo durarán estas protecciones y los clientes comienzan a exigir las opciones más baratas provenientes del extranjero.
